3 tendencias de minoristas que impulsan la adopción de centros de microcumplimiento
¿Qué es un centro de microcumplimiento?
Los centros de microcumplimiento (MFC por sus siglas en inglés) son pequeñas instalaciones de almacenamiento habilitadas para la tecnología que son construidas cerca de los consumidores, a veces incluso dentro de las tiendas. Le posibilitan a los minoristas analizar las tendencias del inventario y moverse rápidamente para satisfacer las demandas cambiantes del mercado. Muchos minoristas están evolucionando a un modelo de distribución en forma de estrella, donde los centros de distribución existentes sirven como centros y los puntos de venta más pequeños ubicados más cerca de los consumidores actúan como radios.
Tendencias que impulsan la adopción de MFC
Dado que la entrega en el mismo día se convierte en un aspecto crucial en la experiencia del comercio electrónico, los centros de microcumplimiento pueden ser la clave para ayudar a los minoristas a tener éxito frente a las expectativas cada vez mayores de los consumidores. Un MFC típico puede ser tan pequeño como un tercio del tamaño de un supermercado típico, pero también puede escalar rápidamente. Los MFC optimizan el espacio al apilar estratégicamente los bienes y aprovechando los robots para el retiro de productos, reduciendo así los costos laborales y aumentando el rendimiento de cumplimiento. Y al acercar los centros de cumplimiento al consumidor final, los minoristas pueden administrar mejor su inventario y vender productos perecederos de manera más efectiva a través de sus canales en línea.
Veamos algunas de las tendencias de minoristas que impulsan la adopción de centros de microcumplimiento:
1. Entrega final al cliente
Los procesos de cumplimiento tradicionales y manuales están luchando para seguirle el ritmo a la creciente demanda de entregas rápidas o recogidas en la acera. La entrega final al cliente juega un papel significativo en el ecosistema logístico general y representa un costo significativo. Los MFC pueden aprovechar la inteligencia artificial (IA) para dirigir los pedidos en línea a la ubicación de cumplimiento óptima y utilizar la automatización en varias etapas, desde la clasificación hasta el embalaje hasta la entrega final al cliente, para acelerar significativamente el proceso de cumplimiento y ayudar a reducir los costos.
2. Supermercado virtual
Los supermercados virtuales son puntos de venta minoristas tradicionales que se han convertido en centros de cumplimiento locales. A medida que la adopción del comercio electrónico se acelera y las visitas a los clientes en las tiendas físicas disminuyen, los minoristas están considerando cada vez más convertir un porcentaje de sus tiendas en supermercados virtuales. Las tiendas ya equipadas con secciones refrigeradas y congeladas pueden ayudar a cumplir con los aumentos en los requisitos de la cadena de suministro frío para cumplir con los pedidos de comestibles en línea. Los MFC en ubicaciones de supermercados virtuales también pueden cumplir con las compras impulsivas más importantes, realizadas cuando se recolectan los pedidos.
3. Cambiando el surtido de productos
A medida que aumenta el volumen de alimentos que se compran en línea, los comestibles se enfrentan a un nuevo desafío: manejar productos secos, refrigerados y existencias congeladas. Debido a que los MFC son hiperlocales, pueden mejorar el almacenamiento y la administración del inventario, así como manejar surtidos únicos en cada ubicación. Además, la combinación de dispositivos conectados y la automatización de cumplimiento le posibilita a los minoristas rastrear el inventario y la vida útil en tiempo real. Los MFC son muy aptos para el uso de tecnologías predictivas que pueden ayudar a mantener los artículos de alta demanda almacenados al mismo tiempo que limitan las pérdidas en artículos perecederos.
Los MFC están a punto de transformar el panorama minorista
Con la demanda de los consumidores trasladándose hacia las compras en línea, y es probable que continúe capturando más de la demanda de tiendas físicas, el uso de MFC en tiendas operativas o supermercados virtuales puede ayudar a los minoristas a transformarse para satisfacer las necesidades cambiantes de los consumidores. El uso de tecnologías que aumentan la eficiencia, tal como dispositivos conectados, robótica y automatización, puede reducir los costos, aumentar la agilidad y permitir una entrega más rápida en al usuario final. Además, los sistemas automatizados pueden reducir el tiempo de reacción entre las tendencias de la cadena de suministro, la demanda de productos y la disponibilidad de productos, incluso incluyendo las perturbaciones.
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